La Expresion del Teenager
Descrito como el peor ataque en Estados Unidos desde el 9/11, el pasado domingo en las primeras horas del día un hombre entró a una discoteca LGTB, llamada Pulsen, en la cuidada de Orlando, Estados Unidos, y disparó un rifle de asalto y una pistola, dejando como resultado 49 muertos y 53 heridos, un ataque que nos ha afectado a todos los ciudadanos del mundo. La sociedad mundial se encuentra conmocionada por este hecho, y han tomado esta oportunidad para recapacitar sobre los errores que seguimos cometiendo.
Da mucha tristeza escuchar los testimonios de las personas que sobrevivieron y leer los últimos mensajes de las personas que no. "Los disparos no sonaban como si fueran de un arma regular, sonaban como si disparan repetitivamente y nunca fuera a terminar”, expresó Anthony Torres, una de las personas que logró salir con vida del hecho.
Este acto tan lamentable trae a relucir muchos problemas que está viviendo el país Norteamericano. No por ser el país donde muchos deciden ir a emigrar quiere decir que sea de las mejores naciones para hacerlo.
En primer lugar trae a relucir el problema con el control de armas que vive el país. No existe una ley que regule el acceso a armas, cuando vas a acceder a ellas te hacen una pequeña investigación, pero puedes comprarlas hasta en grandes cadenas de súper mercados como Walmart. Esto permite que personas como Omar Mateen, actor de los disparos el pasado domingo, puedan acceder sin problema a armas y acabar con la vida de muchas personas. Actos de violencia continúan ocurriendo a diario y hasta el Presidente Barack Obama ya parece estar acostumbrado a salir y dar el mismo discurso una y otra vez.
En segundo lugar demuestra que aún queda un largo camino por recorrer para eliminar la discriminación contra las minorías. Hace exactamente un año se aprobó de manera historia el matrimonio entre personas del mismo sexo en todo el territorio estadounidense, y a pesar de los grandes terrenos que ha ganado la comunidad LGTB en todo el territorio, aún existe una gran discriminación contra ellos, no los ven ni los tratan como iguales, los rechazan por sus decisiones y les limitan el derecho de ser ellos mismos.
En tercer lugar que el terrorismo sigue siendo un hecho que afecta nuestro día a día. Debido a la magnitud del ataque y a una supuesta vinculación con grupos terroristas, este acto ha sido considerado como de terrorismo, demostrando que seguimos siendo muy vulnerables ante estos actos e incrementando el miedo en la población mundial.
Quienes viven en Estados Unidos no se sienten seguros, porque ahora se han dado cuenta del grave riesgo que representa el hecho que cualquier persona tenga acceso a un arma y pueda decidir sobre tu vida. No es justo que un lugar destinado a ser seguro para personas de la comunidad LGTB se tenga que ver vulnerado de esta manera.
Existe una doble moral de parte de los políticos republicanos que han expresado sus condolencias por el hecho, porque ellos no apoyan a la comunidad LGTB, y porque es realmente gracias a políticas que han rechazado que aún no se ha logrado establecer un control de armas adecuado.
Cada nación tiene sus problemas internos que ponen en peligro la calidad de vida de los ciudadanos y en Estados Unidos el acceso a armas, la discriminación y el terrorismo son los principales factores que le afectan. Hemos llegado a un punto donde los seres humanos nos odiamos tanto los unos a los otros que no nos importa la vida, matamos a diestra y siniestra por el simple hecho de no estar de acuerdo con la otra persona. Esperemos que la vida de estas 50 personas no se haya perdido en vano, sino que sea la oportunidad para pasar una ley que regule el acceso a las armas.
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