La Expresión del Teenager
Johanna Villasmil
Dentro de un país es común que existan
descontentos en la población por la decisiones políticas que puedan tomar los
mandatarios, porque a pesar de que la finalidad de una democracia es seguir la
voz del pueblo, es casi imposible hacerlo. En un país donde hay millones de
habitantes siempre habrá uno que no esté de acuerdo con las políticas del
gobierno. En la historia vemos como grupos de personas descontentas por lo que
ocurre en su país se han alzado y han tenido encuentros armados, han realizado
golpes de estado y han creado grupos para la sustitución de los gobiernos.
En Colombia en 1964 se creó el grupo
guerrillero FARC (Fuerzas Armas Revolucionarias de Colombia), quienes intentan
implantar un estado socialista en Colombia. A pesar de esto, desviándose de su
ideal, las FARC realizan acciones criminales como narcotráfico, secuestros,
extorsión, guerra de guerrillas, asesinatos, ataques con armas no
convencionales, reclutamiento forzado de menores, siembra de minas antipersonas
y más.
Desde su creación el gobierno colombiano
ha luchado contra ellos y el Presidente actual, Juan Manuel Santos, busca
obtener un estado de paz con ellos “ahí está la mano abierta, y ojalá lleguemos
al fin de este conflicto que tanto daño, tanta violencia, tanta muerte le ha
causado a Colombia”.
En sus inicios las FARC tenían un
propósito clave donde buscaban implantar un sistema de gobierno distinto que le
pudiera dar más poder a los ciudadanos comunes tratando de llevar un
socialismo, porque el sistema de Colombia le impedía a una persona común
alcanzar altos cargos políticos o militares si no son personas de casta. Pero
en este camino las FARC se perdieron y se comenzaron a involucrar en actos delictivos,
convirtiéndose en un grupo de delincuentes armados.
Lo que esta buscando el Presidente Santos
es poder llegar a un diálogo de paz con este grupo guerrillero y darles la
posibilidad de que puedan hacer vida política en el país, pero existe un problema,
las FARC ahora son un grupo de delincuentes y con delincuentes no se puede
tratar y menos darles la posibilidad de manejar un país, como diría el ex
Presidente Uribe.
En Colombia en 1970 surge un grupo
guerrillero denominado Movimiento 19 de Abril, con quienes después de algunos
años y diálogos de paz lograron que se desmovilizaran y se convirtieran en un
movimiento político de izquierda denominado AD-M19. Actualmente el Alcalde de
Bogotá, Gustavo Petro, es un ex militante del Movimiento 19 de Abril, lo que
demuestra que sin llegar a delinquir un grupo puede lograr sus objetivos.
Las FARC no solo se concentran en
Colombia, sino también en sus países fronterizos. En el caso de Venezuela la
presencia de esta organización guerrillera ha sido muy notoria. Cuando en
Colombia mandaba Álvaro Uribe, este le entregó al Presidente Chávez una lista
de donde se encontraban las FARC en Venezuela, a lo que el mandatario
venezolano le dio caso omiso.
Nosotros nos vemos afectados de muchas
formas por este grupo guerrillero. Por un lado están las personas que migran a
Venezuela, ya sean desplazados o irregulares, quienes se convierten en una
carga para el país. Los desplazados son las victimas, aquellos que solo llegan
con una maleta y bocas que alimentar. Los irregulares son el hampa, los que
delinquían en Colombia y que lo van a seguir haciendo en Venezuela para poder
vivir.
No se explica como para los colombianos
hace 25 años atrás Venezuela era un país donde ibas a mejorar y a escapar de la
violencia que se vivía en ese entonces, actualmente los venezolanos vemos así a
Colombia, un país donde podemos ir a buscar una mejor calidad de vida a pesar
de su conflicto armado interno. Como venezolanos nos conviene que nuestro país
vecino llegue a obtener paz con este grupo guerrillero pero sin darles el poder
de la Nación, también necesitamos que nuestro mandatario luche por eliminar la
presencia de las FARC en el país porque suficientes problemas tenemos como para
también adjudicarnos los de Colombia. Si luchas por obtener un mejor país donde
todos los ciudadanos tengan las mismas posibilidades, no te pierdas en el
camino porque así jamás lograrás alcanzar tus objetivos. Ojalá que las
conversaciones que se hagan en Oslo, Noruega, próximamente logren la añorada
paz.
Los quiere Joha
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