domingo, 12 de julio de 2009

Los niños!

La expresión del teenager
Johanna Villasmil

En la adolescencia sucede algo muy común, en donde podemos ver que un niño nos friega la paciencia hasta el punto, de que casi lo odiamos. Esto nos sucede a todos los adolescentes puede ser por un hermanito, primito, vecinito o hijo de los amigos de tus papás. Esto ocurre por la diferencia de edad que puede haber entre el adolescente y el niño. Ya al adolescente no le gusta, ni quiere hacer cosas de niños, por eso este niño que todavía si quiere hacer estas cosas, busca llamar la atención del adolescente y lo único que hace es provocar que este se moleste.

Yo no tengo hermanitos, pero sí tengo una primita; yo soy algo así como una hermana para ella, porque ella no tiene. Cuando estábamos más pequeñas me encantaba compartir con ella, pero cuando yo fui creciendo mis gustos cambiaron y yo ya no quería seguir jugando con cosas de niños pero mi primita sí; llego a tal punto de que me seguía a todos lados y me imitaba en todo. Hubo un momento que me canse, yo sé que no estuvo bien, pero la empecé a tratar mal porque ya me había cansado de tener un chicle atrás de mí; hasta que un día me di cuenta de que mi prima nada mas lo hacía porque me amaba y empecé a cambiar con ella. Hasta el sol de hoy no digo que mi relación con mi primita sea perfecta, pero cada día va mejorando, trato lo posible de no molestarme por cosas tontas aunque a veces me dan ganas de ahorcarla, estilo Homero Simpsons a Bart Simpsons, pero sobre todas estas cosas yo la amo.

Los más normal de este mundo es que los hermanos se pelen, sobre todo por cosas que no tienen la menor importancia. Cuando logras disminuir estas peleas, es cuando te das cuenta de que tu hermano es la persona más importante de tu vida, que no podrías vivir sin él y que es la persona que mejor te comprende porque es la que más te conoce. Así que no te preocupes si odias en estos momentos a tu hermano, ya verás que dentro de unos cinco años lo vas a amar.

Si tu caso, como el mío, es con un primito, vecinito o con el hijo de un amigo de tus papas; se repite la historia igual que con los hermanos; porque así sea que los veas dos veces al año, te van a molestar igual que lo puede hacer un hermano.

Existe algo que nos ha sucedido a todos, que para mí es una de las cosas que más me molestan, es que este niño, en mi caso mi primita, buscaba imitarme o copiarme en las cosas que yo hacía; entonces que sucedía si yo quería algo, ella también lo quería y por consiguiente, lo tenía que compartir o se lo tenía que dar todo a ella. Esto antes era una de las cosas que hacía que no nos pudiéramos unir, pero a medida que ella ha ido creciendo, ha cambiado y ya este problema no se presenta.

La próxima vez que vayas a ver a este niño, respira hondo, trata de hacer cosas que a los dos les guste y lo más importante piensa que dentro de un par de años esto va a cambiar así que disfruta el momento y no te molestes.

Recuerda que nuestro punto de contacto es laexpresiondelteenager@gmail.com, ahí podrás dejarme tus inquietudes las cuales se las consultaremos a personas expertas que les darán respuestas, y las desarrollaremos en futuros artículos. Les cuento que me pueden dejar mensajes en mi blog donde puedes leer los anteriores artículos, y la dirección es www.laexpresiondelteenager.blogspot.com. Pero eso no es todo puedes oírme también cada vez que quieras en www.laexpresiondelteenager.podomatic.com, ésta es la dirección del podcast.
Los quiere Joha

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