De 2014 a 2015

La Expresión del Teenager

Johanna Villasmil

@johavillasmil

Estamos por finalizar el 2014, un año en el que los venezolanos, sin importar nuestras preferencias políticas, nos la vivimos difícil. Diciembre es entonces el momento perfecto para evaluar que logramos y que nos faltó por hacer, de tal forma que podamos comenzar el año siguiente con nuevas metas. Pero no solo debemos hacer esto en lo personal, también podemos evaluar de manera general al país y así crear metas que lo involucren.

La frase más repetitiva de los últimos años durante esta época es “no parece navidad”, pero este 2014 es cuando yo siento que realmente se hizo verdad. Sales a las calles y no sientes las fiestas, es como un día cualquiera, como un mes normal y con la única diferencia que hay pan de jamón, hallaca, pernil y ensalada de gallina en el plato, si es que consigues todos los ingredientes. En las calles no hay luces, ni en las casas de las personas. Todo el mundo ha seguido su rutina como si se tratase de unas semanas cualquieras, sin tomarse el tiempo de compartir, que es ahí donde se encuentra el verdadero sentido de la navidad.  

La verdad es que quién puede tener ánimos de celebrar con todo lo que ha ocurrido este año. El 2014 fue lleno de protestas, escasez, crisis económica, presos políticos y más, por eso la época de navidad está tan triste al ser el reflejo de todo lo ocurrido durante el año. Al ver todo esto el 2015 se aproxima de manera más preocupante, si los cambios fueron para peor durante este año, que será de nosotros en el próximo.  

Como no todo es malo, en el 2015 también se vivieron momentos de alegrías para los venezolanos, como cuando Venezuela recibió su primer Goya por la película “Azul y no tan Rosa”.

De manera particular el 2014 para mi fue un buen año porque tuve la oportunidad de crecer profesionalmente al realizar las pasantías en la Organización de Estados Americanos, pero durante este período también viví situaciones muy complicadas producto de la situación generalizada que tenemos en el país.

Es muy complicado para todos establecer nuevas metas para el próximo año porque estamos en el país de lo impreciso, todo puede cambiar en cualquier momento sin previo aviso y también cada día las oportunidades de superación son menores.

A pesar que la navidad no se sienta no podemos olvidar el verdadero significado de la celebración, que se encuentra en compartir con nuestros familiares, amigos y con aquellas personas que tienen menos, también se encuentra en perdonar y dar lo mejor de nosotros. Espero que en las metas que se propongan para este 2015 también piensen en el país, en como pueden trabajar para mejorarlo y en como ser cada día mejores ciudadanos, porque la construcción de una mejor nación comienza en nosotros. Este será el último artículo de este año, así que les deseo que hayan tenido una feliz navidad y que tengan un próspero año nuevo.