La Expresión del Teenager
Johanna
Villasmil
@JohaVillasmil
La situación económica
actual en Venezuela se encuentra en su peor momento desde hace muchos años, por
lo que el pasado viernes 15 de enero de 2016 salió publicado en Gaceta Oficial Extraordinaria
número 6.214 el decreto de Emergencia Económica, como una supuesta medida para
mejorar la situación, siendo realmente una de las formas del estado de
excepción, el cual tendrá una vigencia de 60 días desde el momento de su
publicación. A pesar que en su articulado se establece que está vigente a
partir de esta fecha, la Asamblea Nacional tiene que aprobarla.
Es importante destacar
que la lesgilación nacional especifica que al ser aprobado un estado de
excepción se podrá limitar el uso de servicios o el consumo de artículos de
primera necesidad, tomar las medidas necesarias para asegurar el abastecimiento
de los mercados, el funcionamiento de los serivicios y de los centros de
producción y el uso del tesoro público para gastos no previstos en el
presupuesto nacional.
Hay que tomar en
consideración que hemos llegado a la situación económica actual debido a malas
decisiones que este gobierno ha tomado en el pasado, las cuales realmente no
tienen que ver con la supuesta guerra económica. El modelo actual no favorece la
producción lo que refuerza la inflación, expansión monetaria y sin tener que
realizar rendición de cuentas; por otro lado están las políticas de controles y
razonamiento que han reforzado lo recesivo, lo que produce escasez y multiplica
los precios.
La economista Tamara
Herrera expuso en un importante programa radial que “este decreto está plagado
de mensajes recesivos, de expectativas negativas. Después de la ratificación
del mensaje que ha dado gobierno está cargo de esta solicitud que es
virtualmente una solicitud a una carta blanca en el manejo de los recursos en
bolívares, en el manejo de divisas, para disponer de activos y unas supuestas
obligaciones para producir lo cual es inviable”.
Especialistas en la
materia consideran que el decreto de Emergencia Económica más que ser un
movimiento para la mejora del país es una jugada política porque todo apunta a
que la Asamblea Nacional rechace el decreto y a que el Gobierno alegue que no
pueden solucionar la crisis económica por culpa de la oposición.
La Memoria y Cuenta del
Presidente de la República, Nicolás Maduro, y la respuesta dada por el
Presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, es la muestra que ahora
si hay derecho a réplica, por lo tanto este es un hecho que se debe repetir con
todas aquellas personas quienes han tomado las decisiones económicas desde hace
años, para así conocer que ha pasado con el presupuesto nacional porque aun
cuando el barril estaba en 100 dólares había escasez en el país.
Junto con el decreto de
Emergencia Económica el Banco Central de Venezuela publicó cifras por primera
vez en más de un año, donde se establece que la inflación anualizada para
octubre de 2015 fue de un 141,5% y el Producto Interno Bruto se redujo en un
7,1%.
Todo lo que hacemos a
diario se mueve gracias a la economía general del país, la cual se encuentra en
su peor momento. Lo cierto es que el decreto de Emergencia Económica ratifica
el modelo actual que nos ha conllevado a la crisis, lo que quiere decir que
realmente no solucionará los problemas. Estamos a la espera de una nueva
devaluación y de ver si por fin suben los precios de la gasolina y mientras
tantos es necesario estar al tanto de la decisión que toma la Asamblea Nacional
con respecto a este decreto.
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